Cómo utilizar un receptor AV antiguo sin 4K UHD con un televisor nuevo

Tengo un receptor AV antiguo que no es compatible con 4K UHD pero sí con los audios HD (DTS HD y Dolby True HD), así que no estoy dispuesto a cambiarlo. Pero resulta que me he comprado un nuevo televisor último modelo, con tecnología OLED y resolución 4K UHD. Y además utilizo un reproductor externo para ver mis películas. Uno que no tiene doble salida HDMI, como es la Nvidia Shield TV Pro (también aplicable al Apple TV 4K). Pues bien, ahora tengo un problema si quiero seguir utilizando mi sistema de sonido y aprovechar las características de mi nuevo televisor al máximo.

Esto, que puede parecer un caso muy puntual y extraño, me ha pasado a mi personalmente. Y estoy seguro de que a muchos de vosotros. Y es que muchas veces el cambiar un solo equipo de nuestra «configuración de entretenimiento» puede suponer tener que cambiarlo todo o, sino, tener problemas. Porque seamos sinceros, lo primero que pensamos en cambiar casi siempre es el televisor, ya sea para comprar uno mejor o uno más grande. Quizás en un futuro pensemos en actualizar el sistema de sonido, pero mientras tanto podemos tener complicaciones.

Profundizando un poco más en mi caso concreto, os puedo decir que compré un televisor OLED con resolución 4K UHD. Sin embargo, el receptor AV que tengo es un Denon AVR-1912, el cual tiene ya, y os hablo de memoria, más de 20 años. Pero sigue funcionando y además es compatible con DTS HD y Dolby THD. Así que, teniendo en cuenta que en esa sala no tengo Dolby Atmos, sigue haciendo su trabajo.

El gran problema vino cuando quise conectar la Nvidia Shield TV Pro, mi reproductor multimedia de cabecera, con el televisor. ¿Por qué? Pues porque mi Denon 1912 es compatible con los audios HD, pero no cuenta con conectores HDMI compatibles con la resolución 4K UHD (normal, como os decía tiene más de 20 años).

Tenía dos soluciones «fáciles», pero ninguna de ellas me satisfacía. La primera era configurar la Nvidia Shield TV Pro para que lo emitiera todo en resolución 1080p y conectarla al receptor AV. Pero pensé, entonces, ¿para qué me he comprado una súper tele 4K UHD? No era una buena solución. La segunda era conectar la Shield al televisor y mandarle el sonido al receptor AV por ARC. Mala idea también, por dos motivos. El primero porque mi receptor AV no tiene eARC, claro. Y el segundo porque mi televisor no es compatible con los audios HD, como suele ser habitual.

La solución para seguir usando mi receptor AV: un adaptador HDMI

Como quería aprovechar al máximo las capacidades de mis tres equipos, comencé a buscar soluciones. Y buceando por la web encontré un dispositivo que parecía hacer lo que yo necesitaba: un adaptador HDMI que dividía la señal de entrada en dos salidas, una de sonido y otra de vídeo. ¡Era perfecto!

Como suele pasar con casi todo, en mi búsqueda de adaptadores HDMI me encontré con algunos que costaban 20 euros y con otros que costaban más de 200 euros. Esto me sorprendió bastante porque todos parecían hacer lo mismo. Así que, como pobre que soy, empecé con los modelos económicos. Gracias a la facilidad que ofrece Amazon para devolver los productos, os puedo decir que compré, si no recuerdo mal, 5 dispositivos diferentes.

Empecé con los de 20-25 euros, pero ninguno me funcionó. Después fui subiendo de precio, probando incluso alguno que rozaba los 90 euros, pero aún así no conseguía encontrar el dispositivo que hiciera lo que yo quería. Y es que lo que necesitaba no era un switch o duplicador de la señal, mucho más común, sino un extractor de audio HDMI para mandar el sonido al receptor AV y el vídeo al televisor.

El problema fue la compatibilidad de formatos. Muchos de estos extractores de audio no eran compatibles con la resolución 4K UHD. Y otros no eran compatibles con los formatos de sonido HD. De hecho, algunos directamente no hacían la función que se supone debían hacer. Por eso, tras probar varias opciones y no conseguir la funcionalidad completa que yo buscaba, me tocó probar con uno de los modelos de precio más alto.

HDFury: carísimos, pero hacen lo que prometen

Más concretamente recurrí a un dispositivo de la marca HDFury, la que podríamos denominar como la Apple de los extractores HDMI. En mi caso acabé comprando el HDFury AVR Key, un dispositivo que todavía sigo utilizando. Pero todo esto que os he contado me pasó hace algunos años, así que ahora mismo este dispositivo se podría considerar obsoleto. La marca cuenta con modelos mucho más avanzados y modernos que incluyen compatibilidad con los formatos más actuales.

Eso sí, si entráis en su página web veréis que no solo venden extractores de audio, también otro tipo de dispositivos HDMI que para el uso que le vais a dar si estáis en la misma tesitura en la que yo estuve serán excesivos. Por ejemplo, el fabricante cuenta con gestores HDMI 2.1 EDID, escaladores de resolución hasta 8K y otro tipo de dispositivos muy caros que no son lo que buscamos. Así que debemos fijarnos muy bien en las funcionalidades que ofrece cada uno antes de lanzarnos a la piscina.

Uno de los modelos más atractivos es el HDFury Arcana 2, un dispositivo que es compatible con todos los formatos existentes, tanto de vídeo como de audio. Quizás sea excesivo solo para sacar el audio del HDMI, pero si queréis aseguraros la total compatibilidad con todas las funciones HDMI 2.1 no fallaréis. Eso sí, el precio oficial es de 349 euros.

Es cierto que el Arcana 2 es excesivamente caro, pero sí queréis un modelo de HDFury en Amazon podéis encontrar el Arcana original (que no cuenta con eARC) y seguramente también algunos modelos más antiguos que podrían servir.

Alternativas más económicas

Y por supuesto también tenéis alternativas de otras marcas mucho más económicas. Sin embargo, os debo ser sincero. Yo personalmente no he probado ninguno de ellos, así que no os puedo asegurar que funcionen a la perfección. Antes de comprar fijaros muy bien en las características de cada modelo, especialmente en los formatos compatibles tanto a nivel de vídeo como de audio. Y por supuesto mirar bien que cuenta con dos salidas HDMI, ya que muchos de estos modelos convierten el audio del HDMI y lo sacan por óptica.

Como os decía, estos modelos no los he probado, así que, aunque parecen hacer la función que buscamos, no puedo asegurar que sean compatibles con todos los formatos necesarios. Por suerte, en Amazon podemos probar los dispositivos y si no es lo que buscamos devolverlos.

Así que ya sabéis, si tenéis un receptor AV antiguo que os sigue encantando pero que no es compatible con la resolución 4K UHD de vuestro nuevo televisor, existe una solución. No es económica, pero siempre lo será más que comprar un nuevo receptor AV.